Estudios

Para que la nutrición sea adecuada debe ser individualizada, y existen muchos factores que influyen en la recomendación. Desde una adecuada entrevista de valoración clínica, de calidad de vida, y digestiva, hasta la valoración nutricional de hábitos de alimentación, o el análisis de la composición corporal mediante mediciones antropométricas y bioimpedancia.

 

¿Piensas que tu gasto energético es bajo y eso dificulta la pérdida de peso? ¿Realizas ejercicio físico pero no ves mejoras?. Con la calorimetría indirecta obtenemos datos de gasto energético en reposo y de la oxidación de grasas de manera que se puede elaborar un diagnóstico más preciso y por tanto prescribir un tratamiento eficaz.

Valoración de la historia clínica completa, sintomatología y análisis de sangre y hormonal, para evaluar las posibles alteraciones endocrinas, un adecuado diagnóstico por un Médico Endocrino, para pautar un tratamiento, en coordinación con nuestro equipo de nutricionistas

Realizamos un estudio de valoración de riesgos, hormonal, composición corporal, metabólico, y de hábitos, para valorar, diagnosticar y proponer la mejor recomendación de tratamiento farmacológico, nutricional y de ejercicio físico. Se acompaña a la paciente en esta nueva etapa desde un enfoque multidisciplinar que permite afrontarla desde el bienestar y la salud. 

La ecografía abdominal, mediante el uso de ultrasonidos, permite explorar los órganos del interior del organismo, con lo que ayuda a valorar la grasa visceral en obesidad, la grasa presente en el hígado, la presencia de cálculos en el hígado, vesícula o riñón, o valorar el estado de los órganos abdominales, otorgándole un papel fundamental en el diagnóstico y evolución de patologías como el hígado graso.

Conocer y mantener un adecuado estado nutricional y composición corporal juegan un papel muy importante en el rendimiento deportivo.  En función de los objetivos, el punto de partida y los hábitos recogidos en una primera entrevista, se ajustará el planteamiento nutricional para adaptar esa composición corporal al deporte practicado y lograr una mejora en el rendimiento deportivo.

Los estudios genéticos permiten realizar una recomendación nutricional más individualizada y de precisión, teniendo en cuenta posibles susceptibilidades genéticas que puedan promover la obesidad o que predisponen a otras patologías.

Especialidades

Las alteraciones y patologías digestivas con una sintomatología asociada como acidez, reflujo, estreñimiento, o distensión o dolor abdominal, así como malabsorciones o intolerancias son muy comunes, y afectan negativamente a la calidad de vida. Una adecuada alimentación en estos casos es fundamental y requiere una recomendación individualizada

El sobrepeso y la obesidad es un aumento de grasa corporal anómalo, que se desarrolla por una conjunción de factores fisiológicos, genéticos y ambientales, y cuya respuesta al tratamiento es muy variable, por eso requiere de una comprensión y abordaje integral de cada caso.

El objetivo siempre debe ser que se produzca una pérdida de grasa, preservando la masa muscular, par lo cual hay que evitar dietas estandarizadas, dietas milagro o demasiado restrictivas. Para ello diseñamos un plan nutricional personalizado, adaptado en calorías y nutrientes y recomendaciones de alimentos, en cada caso. Además el plan debe ser flexible ante imprevistos, enseñando a compensar y evitando prohibiciones para no generar ansiedad, de este modo el hábito es más sostenible a largo plazo.

En adelgazamiento la realización ejercicio físico programado es fundamental para la pérdida de grasa y preservar la masa muscular, para lo que diseñamos un plan de intercambios de ejercicio personalizado y flexible.

Se define la menopausia como la desaparición definitiva de las menstruaciones por un periodo aproximado de 12 meses consecutivos de amenorrea, tras el cual es muy difícil que vuelva  a aparecer. Se interrumpe la producción ovárica, y por lo tanto una reducción brusca de la secreción de estrógenos. Como consecuencia, la mujer sufre cambios físicos y emocionales como resultado de procesos endocrinológicos, biológicos y clínicos. Hay que tener en cuenta que la experiencia es diferente en cada mujer, y que la postmenopausia es una etapa que supone casi la tercera parte de la vida femenina, según la OMS nada puede impedir que la mujer climatérica sea capaz de ser mentalmente y sexualmente sana.

La prevención de riesgos en salud debe ser el objetivo del tratamiento, en el que la alimentación y el ejercicio juegan un papel clave además de mejorar sustancialmente la calidad de vida. Diseñamos un plan nutricional personalizado, adaptado en calorías, nutrientes y recomendaciones de alimentos, en esta nueva etapa de la vida de la mujer, junto un plan de intercambios de ejercicio personalizado y flexible. 

En muchas ocasiones nuestro estado emocional afecta a como nos alimentamos, desde aspectos tan básicos como nuestra organización, pero también el autocontrol. Es normal que ciertas emociones como alegría, tristeza, enfado, ansiedad o frustración, afecte a que, como y cuanto comamos. Sin embargo, cuando estas situaciones nos afectan diariamente estamos cambiando un hábito a peor que puede afectar negativamente al estado de salud, y desde luego empeorar nuestro estado anímico. No solo se trata de adaptar la alimentación y aprender a que esta sea flexible, sino dando al paciente herramientas para que el mismo aprenda a identificar y gestionar estas emociones. Para ello contamos con nuestro equipo de nutricionistas y psicólogas para ayudarte a conseguirlo

La fertilidad está tanto en hombres como en mujeres influenciada por muchos factores ambientales en relación al estilo de vida, entre los que los hábitos de alimentación y el peso ponderal juegan un papel fundamental. La forma de alimentarse durante el embarazo y la lactancia influirá positivamente en la salud y en la calidad de vida de la madre, y en el desarrollo del bebé, mediante un plan de alimentación personalizado

La cirugía bariátrica y endoscópica son opciones en obesidad, con el objetivo de buscar pérdidas de peso significativas y mejorar las comorbilidades asociadas. Estas técnicas han aumentado su seguridad y son eficaces, pero presentan complicaciones por lo que la personalización del plan de alimentación y la reeducación son imprescindibles

El envejecimiento es un proceso en el que ocurren cambios fisiológicos que afectan a todo el cuerpo, y que pueden suponer riesgos en salud, y el desarrollo de diversas patologías, como la sarcopenia, la disfagia o la desnutrición. Realizar una valoración del estado de salud y del estado nutricional, es necesario para planificar una plan nutricional, así como tener en cuenta los factores alimentarios que contribuyen a prevenir riesgos.

Adaptar la alimentación en un niño nunca debe significar “ponerle a dieta”, sino cambiar hábitos, desde la elección de alimentos, como en las diferentes opciones que se le pueden presentar, pero como en cualquier modelo educativo eficaz, se debe hacer sin confrontar, y en el caso de alimentación sin prohibir.

La OMS ha alertado sobre el grave problema de Salud Pública mundial que supone la obesidad infantil. Así mismo, es una realidad que los niños obesos y con sobrepeso tienden a seguir siendo obesos en la edad adulta y tienen más probabilidades de padecer a edades más tempranas enfermedades no transmisibles como la diabetes y las enfermedades cardiovasculares. Es imprescindible forjar hábitos saludables desde la infancia y que sean interiorizados y llevados a cabo de forma automática por los niños desde muy pequeños, con la ayuda y ejemplo fundamental de padres y profesores.

En lugar de trabajar con dietas hipocalóricas, nunca recomendadas por estar en fase de crecimiento, recomendamos una alimentación equilibrada adaptada a cada edad y situación, aprendiendo a jugar con los diferentes alimentos, y promoviendo el ejercicio físico.

La composición corporal individual depende en gran parte de la genética, y el sistema endocrino, no obstante el estilo de vida, la alimentación, el ejercicio físico, el comportamiento alimentario o el estrés, entre otros factores pueden modificar temporalmente la masa grasa y masa muscular. Cuando hay una situación de bajo peso (IMC por debajo de 18,5) con un bajo porcentaje de grasa puede suponer ciertos riesgos en salud, que requieren de un tratamiento médico, nutricional, y psicológico. Es fundamental un adecuado diagnóstico médico y tratamiento nutricional hipercalórico personalizado y equilibrado en el aporte de nutrientes, enfocado al aumento progresivo de la masa grasa, o magra en concordancia con la composición corporal. Aumentar de peso no lleva intrínseco una alimentación repleta de alimentos o productos alimentarios calóricos. El tratamiento nutricional es progresivo, adaptado y siempre con su base en el patrón de la Dieta Mediterránea.

La conciencia cada vez mas arraigada en cuidar el medio ambiente mediante nuestra alimentación, y la utilización eficiente de los recursos limitados, junto con la preocupación por un buen estado de salud, o por otras convicciones personales, convierten al vegetarianismo en una opción alimentaria cada vez mas mayoritaria, y recomendable.

Por otro lado la falta de conocimiento sobre como proceder en el cambio de una forma alimentaria a otra, se convierte a veces en un riesgo de padecer déficits en micronutrientes. Una alimentación vegetariana u otras opciones como ovolacteovegetarianos, completa y sin carencias, es posible siempre que se realice con un adecuado equilibrio nutricional y bajo supervisión médica.

Elaboramos un plan de intercambios de alimentos personalizado, de esta forma aprenderás a comer de una forma equilibrada y no solo segura, sino que puede ser mejor para tu salud, y desde luego más sostenible.

La prevalencia de personas que tiene una TCA en España en total es de entre un 4-6%, entre anorexia nerviosa (AN), bulimia nerviosa (BN) y trastornos de conducta alimentaria no especificados (TCANE).

En consulta de nutrición es muy habitual que nos encontremos muchos pacientes que o bien quieren hacer una dieta hipocalórica estando dentro de su peso ideal, o bien  pacientes en sobrepeso y obesidad de larga duración con  antecedentes de dietas restrictivas, que incitan a situaciones de restricción, compulsión o compensación, con condicionantes de culpabilidad, ansiedad, y frustración que a largo plazo hacen que la situación se mantenga. Son trastornos muy complejos respecto a los factores de riesgo ya que intervienen factores genéticos, de personalidad, familiares y socioculturales.

Es importante diagnosticarlos y tratarlos correctamente, y  se haga de forma multidisciplinar, liderado por un psicólogo, y en los casos en los que se estime conveniente y siempre coordinados, por un nutricionista, para mejorar la evolución de estos pacientes, previniendo riesgos que pueden ser muy graves.